domingo, 4 de abril de 2010

Maquinarias contemporáneas

No dejan de sorprenderme "los avances de la ciencia" (como si se pudiese avanzar algo o a alguien...). Mientras millones de personas se mueren de hambre en el mundo, algunos científicos se emperran en demostrarnos que el mito de Big Bang (invención moderna del origen) es real; que es posible, mediante un choque de protones, lograr un germen de universo. Al mismo tiempo, encuentro en internet este video de TED donde la propuesta es convertir al cuerpo en máquina fotográfica, reloj, teléfono, hasta en proyector de videos gracias a una rara maquinaria que se cuelga en el cuello.
Estas inventivas, desafios casi de ciencia ficción, nos atraviesan en la contemporaneidad (Spielberg, el futuro llegó hace rato...). Pareciese que podemos jugar a ser dioses, robots, sanguijuelas, piedras o lo que sea. El desafio del humano no es más ser sí mismo sino transmutarse en cualquier ser producto de la imaginación. El mundo maravilloso que se creo en los noventas (marcado por la reflexión estética de absolutamente todo: eso demode llamado posmodernismo) da paso a una ciencia que se mueve en los lindes de lo fantástico. ¿Maximización virtual de la fe en lo científico?
Quizás, desde los lindes de los reinos, desde ese espacio estriado que reune naturaleza y tecnología podamos encontrar una virtualidad nueva: espacio dinámico que repruebe toda confirmación de los espacios virtuales que se quieren imponer como últimos y acabados, espacio nebuloso que maquinice el cuerpo sin subsumirlo a la maquinaria de la mercadotecnia. De esta manera, tanto el intento por justificar el origen (el Big Bang) como el sexto sentido maquínico serían desmoldados de su lugar, vueltos a una posición sin centro, sin justificación. Para ser simples, "nos encanta que traten de justificar el Big Bang pero si lo justifican, aún así, no es prueba suficiente para creer en él", "el sexto sentido puede ser utilizado más allá de la técnica de mercado" y muchas más formas de pensamiento que, de a poco, van a ir surgiendo (como voces en off, una multiplicando a la otra).

2 comentarios:

  1. "nos encanta que traten de justificar el Big Bang pero si lo justifican, aún así, no es prueba suficiente para creer en él". Esta me parecio la joyita del texto. Muy bueno. Se esperan otros. Saludos. Alfonso.

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